AÑO 1: “EL INICIO”

Como decíamos anteriormente, la conmemoración del inicio de la actividad pastoral, el 19 de octubre de 1969, tendrá una especial relevancia. Y lo haremos centrándonos de forma especial en dos aspectos: los orígenes lasalianos y la advocación de Nuestra Señora de la Aurora, la primera a la que rendimos culto. Los actos y cultos se celebrarán entre los meses de enero de 2019 y enero de 2020.

AÑO 2: “LA DEFINICIÓN”

Nos adentramos en el segundo año de la conmemoración. Es el curso de la reflexión y la preparación del momento culminante. No se trata de extender en exceso el programa de actos sino de mantener viva la llama del recuerdo con un mes, denominado el Mes del Aniversario, en el que se concentre el núcleo de actividades. Todas tendrían lugar en octubre del año 2020.

AÑO 3: “LA FUNDACIÓN”

Nos adentramos en el último curso de la conmemoración que comprende dos años. Es el curso de la clausura, el de los actos más oficiales. En octubre de 2021 se celebraría el Mes del Aniversario con actividades similares a las del año anterior. Ya en 2022, año del 50 aniversario de la erección canónica, se culminaría el trienio con un programa de actos y cultos de mayor calado, similar al de 2019. Entre ellos, el Cabildo General aprobó la solicitud de una salida procesional extraordinaria de la imagen del Señor de la Sagrada Resurrección, en mes y día aún por concretar.

LA OBRA SOCIAL

La conmemoración de este 50 aniversario tendrá, como no podía ser de otro modo, un importante componente social. Algo que simbolizaremos con nuestra adhesión a una obra social del Instituto de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle), en el que se fija el origen de nuestra corporación. Para ello nos incorporaremos de forma activa a la obra socioeducativa “Manos Abiertas (Con Norte)”. Una entidad sin ánimo de lucro, situada en el barrio del Polígono Norte de Sevilla, de carácter social y educativo, cuyo fin es intervenir en contextos de vulnerabilidad y/o exclusión social, creando espacios de aprendizaje y desarrollo de menores y sus familias. Todo ello bajo el amparo, el carisma y valores de San Juan Bautista de la Salle, titular de nuestra corporación.

EL CARTEL

El cartel del aniversario ha sido realizado por el pintor D. Luis Rizo Haro. Se trata de un cuadro al óleo sobre lienzo de gabardina cuyas medidas son 116×81 centímetros. La obra muestra en un primer plano a la imagen de la Sagrada Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo. Detrás, en un segundo plano, la Cruz del martirio vencida por la Vida en la Resurrección del Señor. Una idea que también aparece en el color verde de la Cruz, “símbolo de Vida”, en palabras de su autor.

Sobre los brazos de la Cruz se añaden las iniciales en alfabeto griego Alpha y Omega, como representación del principio y el fin de las cosas, encarnadas en la propia imagen de Cristo. A los pies del Señor aparece un paisaje urbano actual de la línea de cielo de Sevilla tomado desde las Setas de la Encarnación, que permite “traer a Sevilla” al Señor de la Resurrección. Y se hace además en un momento temporal concreto que viene a representar la Aurora de cada día.

EL LOGOTIPO

El logotipo del L Aniversario Fundacional será utilizado durante los tres años que dure la conmemoración y ha sido realizado por D. Rafael de Rueda Burrezo. Según el autor, “nace de la idea de conjuntar los distintos elementos del mismo a través de su representación alfabética en forma de iniciales, formando un elemento final único con significado propio, de lectura fácil, sin que cada uno de los elementos que lo construyen pierda su significado individual”.

Así pues, el logotipo se conforma con las iniciales L mayúscula (representación del número 50 en la nomenclatura romana y motivo principal de la creación del logotipo), R mayúscula (inicial de la palabra Resurrección y objeto de la creación del logotipo), las iniciales en alfabeto griego Alpha y Omega (principio y fin de todas las cosas, representación reconocida a través de los tiempos de la Sagrada Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo).

Estas iniciales se conforman enlazadas entre sí para crear el cuerpo principal del logotipo. Su disposición se ordena en función de la importancia de su mensaje. Así pues, la L (50 aniversario) aparece en primer plano pues es el motivo principal del logotipo. La R (Resurrección) aparece en segundo plano como objeto de la conmemoración. Las iniciales Alpha y Omega aparecen en tercer plano como refuerzo de la R, para explicar claramente que la R es, sin lugar a duda alguna la representación alfabética de la Resurrección.

Todos estos elementos se unen entre sí para crear un mensaje final unificado. Las iniciales L y R se funden entre ellas compartiendo parte de su diseño para explicar que no pueden existir el uno sin el otro. El aniversario es parte de la historia de la Hermandad y por eso comparten un espacio y un diseño común en el logotipo. De esta unión nace el mensaje de la Resurrección mediante el Alpha y el Omega, que parten del centro del logotipo de forma radial, a modo de resplandor, como mensaje final de la Resurrección que ilumina el mundo.

Para cerrar el logotipo se incluye un elemento independiente, el único que no es una inicial alfabética, que es el formado por las tres estacas brisadas representativas del escudo de la Asociación de Antiguos Alumnos de La Salle, germen del que nace y se funda la Hermandad. Este se sitúa en la parte inferior del mismo, pues es la base no solo del logotipo, sino también de la propia Hermandad sobre la que su historia y patrimonio se va conformando.

Para representar todos estos conceptos se ha optado por un diseño sencillo y minimalista, que no obstruya su lectura simple y directa y que sea fácilmente reconocible tanto en su lectura global como por sus elementos independientes. Se construye solo con dos colores, el dorado y azul totalmente identificables con la identidad corporativa de la Hermandad.

Finalmente, el logotipo se apoya en los cuerpos de texto necesarios de información del evento donde la palabra Resurrección es la principal protagonista y los textos secundarios se construyen a continuación con distintos tamaños de texto y color en función de su importancia.

El resultado final es un logotipo serio, limpio en su lectura a pesar de su profuso significado, fácil de identificar y de identificarse con el gracias a su identidad corporativa asociada a la propia de la Hermandad de la Sagrada Resurrección de Sevilla.